Advertencia!

por Alice Blair Sáb Dic 25, 2010 8:03 pm

Luego de darle muchas vueltas en su cabeza a la situación, decidió que no podía solo guardárselo. Y es que si no fuera porque Wesh le había dicho que no se lo dijera, no tendría aquella sensación en el pecho de que algo estaba por pasarle y que ella, aún sabiéndolo, no podía evitarlo. Decidió ir a hablarle a la madre médium. Tal vez ella pudiera darle algún buen consejo.

Era de noche, pero no de fiesta. Alice había reemplazado su túnica por uno de sus vestidos de encaje, sencillo pero hermoso, antes de dirigirse a la carpa de Margot, sintiendo la urgencia de hablar con ella a como diera lugar, sin embargo, al llegar, no pasó inmediatamente ya que la otra podía estar ocupada y no quería interrumpirle. Podía esperar por ella de ser necesario. Suspiró. - Madre... ¿Estas ocupada? - Preguntó - Necesito... consultarte algo, si es posible... - Exclamó, no encontrando una mejor manera de explicarse.

por Margot Fadreck Sáb Dic 25, 2010 9:31 pm

Acababa de sentarse después de terminar de limpiar el desastre de sus niños, mismos que habían dejado al corretear por ahí cuando ella les diese esos dulces, peleando y discutiendo cuando al final ella misma les arregló el problema... pequeños más traviesos, ¿no?

-¿Alice? -cuestionó al escuchar su voz, para sonreír-. Adelante, querida... entra -le pidió, yendo a abrirle la "puerta", por así llamarle-. Hola, mi amor... entra, por favor -le pidió, entrando ella igualmente con una sonrisa-. ¿Te gustaría algo de tomar?

por Alice Blair Sáb Dic 25, 2010 9:39 pm

Pasó cuando Margot la introdujo en su carpa y tomó asiento en uno de los enormes cojines del suelo, aún con aquella expresión ligeramente angustiada en el rostro. Levantó la mirada cuando le preguntó acerca de la bebida y asintió suavemente. - Si, por favor... Y si puede ser algo caliente se lo agradecería mucho, Madre... - Comentó la joven. Quería algo de té o alguna infusión caliente que le mantuviera los nervios lo suficientemente calmados como para poder explicarse, o aquella visita no serviría de nada. Sabía que Margot era realmente intuitiva en ocasiones, pero quería que comprendiera lo de Wesh, y tal vez, solo tal vez, ella podría advertirle de un modo no tan evidente que evitara que se cumpliera la visión que había tenido. Suspiró y solo se quedó allí, sentada, jugando con las manos en el regazo en lo que volvía la mayor.

por Margot Fadreck Sáb Dic 25, 2010 10:38 pm

Apenas la observó y suspiró, con ternura, para ir a acariciarle la mejilla y besar su frente de forma maternal, estrujándola y tallándose los hombros.

-Parece que nos han pasado cosas en poco tiempo, ¿no? -indagó, con una sonrisa sutil-. Te haré un delicioso té, ¿de acuerdo¡ Tú comienza a hablar, mi amor -le pidió, mientras buscaba encender el fuego y ponía algo de agua a hervir, dirigiéndose a buscar un par de tazas y acercándose a ella para sentarse a su costado tomando su mano.

Su mirada era dulce y gentil, como siempre, buscaba darle seguridad a sus niños y Alice no era menos que una de ellos, quería saber qué era lo que perturbaba a esos hermosos ojos y terminaba por inmutar aquél rostro de muñeca.

por Alice Blair Sáb Dic 25, 2010 10:54 pm

Cerró los ojos, sintiendo las maternales caricias ajenas que la confortaban y relajaban un tanto. Margot parecía saber siempre que hacer y decir para calmar a quien estuviera a su alrededor. Soltó un suspiro, dejando que su mirada se perdiera en las llamas recién encendidas. - Es acerca de Wesh, Madre... - Comenzó la joven, sintiéndose totalmente en confianza para hablar de ello con la mayor - El otro día estábamos en la catedral ambos, ocultándonos de los guardias y, luego de haberle leído la mano, tuve una visión sobre él - Le explicó - El problema es que... él no quiere que le diga en lo que consisten y temo que pueda pasarle algo... - Musitó, desviando luego la mirada del fuego de nuevo a su regazo, mordiéndose el labio inferior - Además que... digamos que le traje a la memoria recuerdos no muy agradables y ahora no se como ayudarlo a que se ponga bien de nuevo. Se ve tan... decaído y triste - Murmuró, soltando un suspiro, acomodándose un mechón tras la oreja antes de levantar la mirada a la otra, esperando su respuesta. - ¿Que opina, Madre?

por Margot Fadreck Sáb Dic 25, 2010 11:15 pm

Odiaba ver a sus niños en mal estado y, al parecer, Alice no la estaba pasando bien, pero... ¿Wesh? No sabía del pasado del muchacho porque él mismo siempre se lo había reservado, pero le encantaba encontrarse en él a un muchacho activo y divertido.

-¿Qué pasa con Wesh? -cuestionó, antes de escuchar el resto y suspirar suave... esos ademanes no le gustaban, no en su niña-. No podemos afectar sobre la decisión de Wesh, cariño... yo lo comprendo, porque si él no quiere saberlo por algo será... pero mejor dime tú, ¿qué es lo que ves sobre él?

Y es que parecía demasiado para ella y el notarla así no le agradaba... a Alice ella la había ayudado y ahora se esforzaba por continuar en ello.

-Sobre su pasado... ¿crees que sea debido que me cuentes? Si es algo demasiado íntimo y te lo confió a ti, no te preocupes, ¿sí? Déjalo... pero, linda, en el corazón de un hombre hay mil y un cosas... ¿crees poder ayudarlo?

por Alice Blair Sáb Dic 25, 2010 11:27 pm

- No se si pueda, pero al menos... me gustaría intentarlo, Madre... - Suspiró, antes de contarle - Fue todo demasiado rápido; de repente vi a Wesh en un callejón, lo arrinconaban y eran al menos unos 20 soldados, o eso me pareció... - Tratando de recordar, calló un instante antes de continuar - Ah! Y protegía a alguien se se encontraba reclinado en el suelo pero no pude ver de quien se trataba... - Suspiró - En ese momento desperté del trance y no pude ver nada más... - Le explicó - Wesh no quiere que le cuente, porque dice que aún así ello no evitará que suceda y que no tiene sentido preocuparse más de la cuenta... - Expresó, prensentandole a Margot el punto de vista del otro.

Calló un momento, como meditando si debía decirle o no a Margot lo que sucedía con Wesh. Suspiró. Le diría solo una parte, por no traicionar la confianza ajena. - Y es que él... al parecer perdió a un ser querido muy importante... Y a pesar de que dice querer olvidarlo, en el fondo no quiere hacerlo - Le comentó, pensativa - Y en ese caso, sus impulsos pueden empezar a ocasionarle problemas... - Al decir esto, inconscientemente se mordió el labio inferior, recordando el beso que se habían dado, que no quiso mencionar pero que le coloreó las mejillas.

por Margot Fadreck Sáb Dic 25, 2010 11:48 pm

-Wesh es espontáneo -empezó, después de que le explicase lo primero, el que no quería saber lo que el destino le deparaba-, es un hombre cálido y protector... lo demuestra con ello, ¿no crees? -le expresó, con una sonrisa cálida-. Y tiene razón... mi amor, no podemos detener lo que nos depara el destino, lo que nuestra luna nos impone -le explicó-, y si él no quiere saberlo... es porque acepta su futuro, sea cual sea.

Y se levantó un segundo para ir a ver el agua y vertirla en una taza, agregó las hierbas y llevó el azúcar para que ella le echara a su gusto, escuchando el resto y poniéndose taciturna, porque ese aspecto lo comprendía.

-Te confiaré un secreto -le dijo, con una suave sonrisa, para mirarla a los hojos-. Hace... no sé, casi treinta años, quizá veintiocho... me enamoré en España, de un soldado -comenzó-, y me casé con él... y a mis veintiseís me embaracé... pero perdí a mi bebé en un accidente cuando ambos íbamos rumbo a España y él... viajó a la Nueva España, pero nunca regresó.

Finalizó su "relato" y bebió un poco de su té, buscando la tranquilidad que esa cálida bebida podía llevar a su cuerpo, suspirando suave después de ello.

-Si Wesh ha perdido a alguien tan amado... no será sencillo olvidarlo... supongo que soy un claro ejemplo de ello, porque han pasado creo que unos veinte años y... no es sencillo superarlo, no porque él ha sido... el amor de mi vida -reveló simple-, Querida... comprendo que quieras que sonría tal cual como siempre... solo dale razones para sonreír, mi amor -dijo, tomando su mano, riendo ante ese rubor-. ¿Se te olvidó algo, cariño?

por Alice Blair Dom Dic 26, 2010 12:33 am

Escuchó atentamente la historia de Margot, y no pudo evitar bajar la cabeza a causa de la tristeza de la misma. Valla que su madre había tenido que psar por mucho y sin embargo, se mantenía fuerte. Suspiró y negó con la cabeza.

- Es que no es lo mismo en tu caso, Madre. - Replicó la muchacha - Él fue el amor de tu vida, y si desde entonces no volviste a relacionarte con nadie, entonces no eres igual a él - Suspiró. Le daba un poco de verguenza contarselo, porque le había asegurado a Wesh que aquello no iba a significar nada, pero de igual forma lo recordaba. - Él dice que la quiere olvidar, pero en el fondo no puede, o quiere no poder olvidarla... - Murmuró - ¡Pero es mentira! - Exclamó alterandose de pronto, antes de bajar la voz de nuevo. Miró su taza, bebió un sorbo, y al recordarlo, volvieron a colorearsele las mejillas - Él... Me besó, Madre... - Admitió, un tanto avergonzada, sin mirarla a los ojos y con el rostro muy colorado - Supongo que por eso es que no lo entiendo... - Murmuró, cohibida.

por Margot Fadreck Dom Dic 26, 2010 1:33 am

Ah... pero si no era el mismo caso, entonces cómo... Bueno, bueno, no estaba ahí cuando todo sucedió, ¿cierto? Pero qué desastre... la niña estaba completamente confundida, mismo por lo que colocó su mano sobre su espalda, buscando darle tranquilidad, intentando comprenderla pero sin lograrlo del todo... ah, pero casi se ahoga con el té cuando se exaltó y se calmó, hasta escuchar lo siguiente que la dejó con el ojo cuadrado.

-¿Que él hizo qué? -cuestionó, tomándose un par de segundos para retomar todo y asimilarlo, emitió un suspiro y luego la miró-. Entonces perdió a un amor... oh, sabía que los espíritus se referían a ello -se dijo a sí misma, para verla-. En resumen... está perdido en lo que pasó... pero, cariño... ¿Qué pasa con ello?

Se cuestionaba a sí misma, no comprendía y no caía y... No, ya caía en cuenta. Maldición... que desgracia, en serio le molestaba.

-Cariño... ¿Qué más dijo él? -cuestionó, mirándole con atención-. Sé sincera, no le diré nada... ¿qué te dijo? -cuestionó, esperando comprender mejor-. Amor... olvidar cosas así no es sencillo, por más tiempo que pase y... si se ha interesado en tí, por algo es querida... nunca se sabe, podrías ser tú quien ocupe ese lugar que alguien antes dejó y, así, hacerlo sonreír de nuevo.

por Alice Blair Lun Dic 27, 2010 4:37 pm

- No lo creo. Para él... ese beso no significó nada... - Musitó, bajando el rostro y dejando oir un suspiro, tratando de recordar todo lo que le había dicho el tragafuegos respecto a aquel acontecimiento. - Cuando nos separamos yo solo me mantuve a aferrada a él, pero me pidió disculpas, diciendo que el había dejado de valer en esto hacía tiempo y que no podría responderme... - No había levantado el rostro mientras hablaba - Y luego volvió a disculparse, pero nunca me soltó. Fui yo quien se safó de sus brazos, ya que resultaba algo incomodo, más aún con lo que acababa de decir - Suspiró y se irguió de nuevo, acomodandose un mechón de cabello con una mano - Recuerdo me le acerqué y le dije que tratara de olvidar o que cargara con lo sucedido, que no se quedara estancado porque no era bueno... Luego, cambiamos de tema otra vez - Admitió.

Negó con la cabeza suavemente. - No puede olvidarlo, cargar con ello tampoco, menos intentar algo nuevo porque dice que ya no vale en este juego... ¿Como debo interpretar ese beso entonces? - Musitó, alterandose un poco, cosa inusual en ella, pero luego procuró calmarse, bebiendo té, aunque aún se le notaba un ligero temblor en las manos.

por Margot Fadreck Lun Dic 27, 2010 4:59 pm

Suspiró... su pequeña Alice. Todos los Españoles resultaban igual, ¿cierto? Le besó la cabeza y negó después, con una dulce sonrisa y acariciándole la mejilla apenas terminara de hablar, para besar ahora su frente, con ese toque maternal que le caracterizaba.

-Está asustado -le aseguró-, los hombres son así, mi amor... Para Wesh no será sencillo si ya ha perdido a alguien querido y... como yo, no quiere que eso se repita -le aseguró-. Perder a mis niños gitanos a manos del ministro es lo peor que me puede suceder y... ¿ya ves? Sigo perdiéndolos... lloro como no tienes idea cada vez que sucede y... Wesh debe temer volver a perder a un amor.

Eso suponía, porque ella eso sentía y si se parecían en ello... Wesh era así, Wesh estaba asustado del amor, del dolor de perder a alguien y no quería sentirlo de nuevo.

-En algo tienes razón... está mal lo que hace, porque huye a lo que es su vida y le huye a la felicidad... pero te equivocas al pensar que ese beso no significó nada porque, te aseguro, significa más de lo que crees... porque un beso no es cualquier cosa, querida... un beso es una probada de su corazón... suponiendo que le gustas, él te gusta igual, ¿no es así? -insinuó,porque parecía obvio ello-. No te aferres a creer como él que solo salió del juego... enseñale que sigue dentro de él y que tú quieres intentarlo con él... búscalo y ayúdalo a superar sus miedos... y enséñale que puede volver a amar a una mujer como podría amarte a ti -le guiñó un ojo...

Porque hablaba en serio, porque se notaba su gusto por el tragafuegos, y porque se verían estupendos juntos, aún más sabiendo que ya habían estado juntos... y que siguieran así, que lo intentaran, sería lo mejor, seguro.

por Alice Blair Lun Dic 27, 2010 5:28 pm

Cerró los ojos, dejando que le acariciara la cabeza como si fuera una niña pequeña. Eso le reconfortaba. La escuchó en silencio, y cuando le dijo que lloraba mucho por ellos, apoyó su mano en la suya como para darle apoyo, sin interrumpirle. Cuando insinuó que el tragafuegos le gustaba, se le colorearon las mejillas ya que, en cierto modo, tenía razon. No supo como, de pronto el mayor comenzó a gustarle, era algo que no pudo evitar y cuando le dió aquel beso, aquel sentimiento se aferró en ella, ocultandose, pero el momento de negarlo había pasado.

Aún ruborizada y algo avergonzada, murmuró. - Pero no sé de esto, yo... Nunca me había pasdo algo como esto - Murmuró, cohibida - ¿Que debo hacer? Es solo... acompañarlo? Me parece dificil siendo que teme a lo que enamorarse representa, ¿Como puedo ayudarlo, madre? - Inquirió - Lo único que se me ocurre ahora con él es, tal vez, dar un paseo o algo asi... Que se distraiga su mente a ver si logro que lo olvide un instante - Musitó, no del todo convencida en ella, apoyandose de la mayor, como buscando consuelo en ella y sus palabras.

por Margot Fadreck Lun Dic 27, 2010 5:59 pm

-Pues que así sea -dijo, como respuesta a sus palabras-. Las cosas se dan solas... tú intenta ser su apoyo, búscalo y háblale... diviértete un rato, charlen, de una amistad salen romances, siempre pasa y ésto podría ser prueba de ello, mi amor... solo inténtalo y date la oportunidad, dásela a Wesh... Además, sirve para ambos... y el conocer o no tampoco importa, cariño... el amor se da solo.

Sí... porque solo aparecía y se iba, nadie podía mandar sobre él, él mandaba sobre todos y no se ponía a discusión... sonrió de nuevo y rió.

-Él te gusta... si te besó, no fue por nada, así que invítalo, dale un pretexto, dile que no quieres ir sola, y habla con él... explícale porqué quieres que olvide lo que le pasó, que lo quieres ayudar y esfuérzate, lucha porque el amor se trata de ello... y da pelea, aunque sea contra un fantasma.

por Alice Blair Lun Dic 27, 2010 6:23 pm

Suspiró pero asintió a sus palabras con mayor firmeza y una leve sonrisa que se pintó en sus facciones, relajandolas y dandoles mayor fortaleza. - Eso haré madre... Intentaré ayudarlo y daré todo de mi... Que sea lo que quiera nuestra diosa Luna... - Musitó, suspirando, apoyada en ella.

Tendría valor y no volvería a acobardarse ante el fantasma de la esposa de Wesh; no dejaría que ella lo atormentara porque ella lo quería y no deseaba que siguiera sufriendo, que siguiera atormentándose por su muerte que, de seguro, no era culpa suya. En definitiva, visitar a Margot era la mejor idea que se le pudo haber ocurrido; ella siempre la orientaba, y la apoyaba como con todos y cada uno de los gitanos. Era la madre perfecta, la que ella siempre quiso tener y que le recordaba un poco a la suya. Dejó que pasara la noche sin volver a indagar en temas mas delicados, compartiendo con ella el té y visiones, pasando la noche tranquila con una firma determinación en mente: Wesh.

[ESCENA TERMINADA]

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